domingo, 26 de mayo de 2013

La Caña y el Roble, ejemplo de flexibilidad.



Cuenta la fábula que al borde de un lago crecieron a la vez un roble y una caña. El tiempo pasó y el roble se hizo grande y fuerte. A menudo miraba la caña y le decía: “Mira lo pequeña y débil que eres. No aguantas nada de peso. La menor brisa te hace doblarte hasta rozar el agua. Me das pena. Ni la más fuerte de las tormentas podría romperme. Ni siquiera sé porque estoy hablando contigo. Deberías sentirte muy halagada.
 
A la caña le daba mucha pena ver como el roble se había convertido en un ser presumido y soberbio. Un día llegó una tormenta muy fuerte. Enseguida la caña se dobló, mientras el roble luchaba con todas sus fuerzas para mantenerse en pie. Durante un tiempo lo consiguió, pero el tiempo empeoró y la tormenta se convirtió en un tornado. La fuerza del viento fue tal que arrancó el roble. Cuando el temporal amainó, unos leñadores aparecieron y lo cortaron en unas horas.
 
La caña, triste por su vecino, pensó: “Me doblo, pero no me rompo. Que pena que tanta soberbia y vanidad le hayan llevado hacia tal extremo”.

Reflexiones:

La flexibilidad te permite distinguir oportunidades, vislumbrar nuevos caminos, saborear lo diferente, descubrir lo desconocido.

El precio del éxito es trabajo duro, dedicación y la aceptación de que si ganamos o perdemos nos hemos esforzado al máximo para alcanzar nuestro objetivo.Vince Lombardi
Esta fábula nos hace pensar que en los momentos que estamos pasando,  la flexibilidad es importante, nadie por muy fuerte que parezca tiene asegurado un puesto. Ya sabes antes de que comience a soplar el viento, evoluciona, modifica tus costumbres, preparate, formate y sobre todo busca alternativas al posible tornado.

domingo, 19 de mayo de 2013

Confia en tí, eres tu mejor aliado!!!






Sucedió una vez que dos ranitas salieron a dar un paseo. Como hacían a menudo, recorrían los prados que rodeaban su charca saltando alegremente. Hasta que un día sucedió algo totalmente inesperado: tras un salto ni más ni menos largo cayeron dentro de un balde que el vaquero había olvidado cerca del establo y que aún guardaba bastante leche.
Al principio las ranitas no comprendían qué había sucedido, incluso encontraban divertida la situación. Pero pronto se dieron cuenta que aquello se estaba convirtiendo en una trampa: por mucho que se esforzaban por salir del cubo, las paredes metálicas eran demasiado lisas y el borde quedaba demasiado alto. Y así lo único que podían hacer era nadar y nadar para no ahogarse en la leche.
Pero el tiempo pasaba y el cansancio se apoderaba de ellas. ¿Te has dado cuenta de que nunca vamos a salir de aquí?, le dijo la ranita mayor a la más joven. Nuestras patitas no podrán soportarlo mucho tiempo y me temo que nunca saldremos de ésta. Moriremos aquí.
No importa, respondió la otra ranita. No podemos hacer otra cosa que nadar. Nada y no te lamentes. Conserva tus fuerzas.
Y las ranitas siguieron nadando y nadando y nadando sin descanso. Al cabo de unas horas, la ranita mayor volvió a quejarse: Nunca saldremos de aquí, éste será nuestro final. Me duelen las ancas y ya casi me es imposible seguir nadando. En verdad ha llegado nuestro fin. A lo que la ranita pequeña respondió: Nada y calla; no pierdas la esperanza. Simplemente confía y sigue luchando.
Y así siguieron, nadando y nadando; pero el tiempo pasaba y sus fuerzas menguaban, pues no paraban de dar vueltas, una detrás de la otra, concentradas en el movimiento de sus patitas y en mantener la cabeza fuera del líquido.
No puedo más, volvió a quejarse la ranita mayor, De verdad te digo que ya no puedo más. Ya no siento las ancas, ya no sé si las muevo o no. No veo bien y no sé hacia dónde me muevo. Ya no sé nada.
Continúa nadando, replicó la otra ranita. No importa cómo te sientas, no pienses siquiera en ello. Sigue adelante, continúa.
Sacaron fuerza de flaqueza y siguieron nadando y nadando. Por poco tiempo, pues la rana mayor pronto cejó en el empeño y con apenas un aliento de voz susurró:
Es inútil. No tiene ningún sentido seguir luchando. No entiendo qué estamos haciendo, por qué he de seguir nadando. Nunca podremos escapar.
¡Nada, nada! ¡Sigue nadando!
Y aún reunieron fuerzas para nadar unos instantes más…, hasta que la ranita mayor, extenuada, abandonó y murió ahogada. Y también la ranita más joven sintió la tentación de abandonar la lucha, de dejarse vencer y acabar con aquello, pero siguió nadando y nadando mientras se repetía a sí misma: Nada, nada. Un poco más, sólo un poco más. Continúa nadando. ¡Nada! ¡Nada!
Pero el tiempo pasaba y la ranita se sentía cada vez más débil. Le dolían las ancas, todo el cuerpo le dolía, pero ella seguía nadando, nadando, moviendo sin cesar sus pequeñas extremidades.
Y de pronto sucedió algo sorprendente. Bajo sus patitas empezó a notar algo de mayor consistencia que la leche, algo sólido, así que reunió las últimas fuerzas que le quedaban, se apoyó en aquella masa y saltó… justo por encima del borde del balde, para ir a parar a la seguridad del prado.
¡Con el movimiento continuo de sus patitas la leche había empezado a convertirse en mantequilla! Y la consistencia de la mantequilla le había ofrecido un punto de apoyo desde el que saltar.

Reflexiones:
  La contrariedad no es una piedra en tu camino. Depende de ti transformarla en un escalón que te permita subir más arriba-
  Nuestra mayor debilidad reside en que tendemos a abandonar. La manera más segura de lograr los objetivos siempre es intentarlo una vez más.
 En la vida tenemos que seguir intentado conseguir nuestros objetivos, no sabemos lo cerca que estamos de conseguirlo la única forma de saberlo es seguir hasta el final. 

No hay que parar de nadar sobre los problemas que nos podemos encontrar,seguro que  tenemos que dedicar esfuerzos, pero conseguiremos lo que nos propongamos. Confia en tí, eres tu mejor aliado.

sábado, 11 de mayo de 2013

Evoluciona !!!!





Una mañana un gato estaba persiguiendo 2 ratones, pero estos fuerón más rápidos y lograrón refugiarse en un pequeño hueco que encontrarón.

El gato desde afuera esperaba la salida de su alimento, - "Miau, miau, miauuu...", decía.

Dentro los ratones murmuraban:

- "Ojo que ahí esta el gato". Decía uno al otro.

De pronto se oyó el ladrido de un perro.

- "Guau, guau, guau"...

Y en ese momento un ratón le dice al otro:

- Llegó un perro y seguro ahuyento al gato, aprovechemos y corramos hacía nuestra ratonera.

Cuál no sería la sorpresa de los ratoncitos al ver al gato afuera esperándolos para darse un gran banquete con ellos.

En un dos por tres, el gato estiró sus dos manos, abrió las garras y lo atrapó.

Mientras disfrutaba de su banquete, el gato decía:

- "En estos momentos que estamos viviendo es necesario evolucionar, adaptarse y super importante hablar varios idiomas, guau, guau, guau!!!". 



lunes, 6 de mayo de 2013

¿qué haces con tus problemas?








El carpintero que había contratado para ayudarme a reparar mi vieja granja, acababa de finalizar su primer día de duro trabajo. Su cortadora eléctrica se había averiado, y le había hecho perder una hora de su trabajo, y ahora su antiguo camión se negaba a arrancar.

Mientras lo llevaba a su casa, permaneció en silencio.

Una vez que llegamos, me invitó a conocer a su familia.

Mientras nos dirigíamos a la puerta, se detuvo brevemente frente a un pequeño árbol, tocando las puntas de las ramas con ambas manos.
Al entrar en su casa, ocurrió una sorprendente transformación. Su bronceada cara sonreía plenamente. Abrazó a sus dos pequeños hijos y le dio un beso a su esposa. Posteriormente me acompañó hasta el coche.


Cuando pasamos cerca del árbol, sentí curiosidad, y le pregunté acerca de lo visto cuando entramos.


- "Ese es mi árbol de los problemas", contestó.

- "Sé que yo no puedo evitar tener problemas en el trabajo, pero hay algo que es seguro: los problemas no pertenecen ni a mi casa, ni a mi esposa, ni a mis hijos. Así que, simplemente, los cuelgo en el árbol cada noche cuando llego. Después, por la mañana los recojo otra vez. Lo más divertido es que... cuando salgo a la mañana a recogerlos, ni remotamente encuentro tantos como los que recordaba haber dejado la noche anterior."


Reflexión:

Buen relato que nos hace pensar en que  nuestros problemas deberían ser aparcados en un compartimento, (armario, percha, alfombra de la entrada, un cajón,  un arbol....., donde retomarlos cuando tengamos  tranquilidad y estado de ánimo para poder resolverlos adecuadamente, seguro que cuando calmadamente nos enfrentamos a ellos en el lugar y momento adecuados no sólo podemos verlos de una manera distinta  sino que podremos encontrar soluciones que en caliente y bloqueados no se nos habían ocurrido.

Toma ejemplo y plantéate hacer lo mismo que en el relato, dejar los problemas colgados no para que crezcan sino todo lo contrario, tomate una pausa,  coge fuerzas para seguir adelante y mañana será otro día, disfruta y aprovecha los buenos momentos, recuerda que  vida solo tenemos una.


 

miércoles, 1 de mayo de 2013

Todos deberíamos ser un poco patos. Qué crees ?










He leído el siguiente texto relacionado a ciertos aspectos de la vida de los patos que se podrían adaptar a lo que significa el trabajo en equipo en cualquier empresa u organización.

Cada año, los patos como otros animales emigran hacia un lugar más cálido para pasar el invierno, te has fijado que vuelan en forma de V ?.

Conoces el motivo?.

Lo hacen porque al mover sus alas, cada pájaro produce un movimiento en el aire que ayuda al pájaro que va detrás de él. Volando en V, la bandada de patos aumenta, por lo menos, un 71% más su poder de vuelo, en comparación con un pájaro que vuela solo.

Cada vez que un pato sale de la formación, siente inmediatamente la resistencia del aire; se da cuenta de la dificultad de hacerlo sólo y rápidamente vuelve a la formación para beneficiarse del compañero que va a adelante.

Cuando el líder de los patos se cansa, se pasa a uno de los lugares de atrás y otro ganso toma su lugar.

Los patos que van atrás graznan para alentar y dar ánimos  a los que van adelante para mantener  la velocidad.

Cuando un pato se enferma o cae herido por un disparo, otros gansos salen de la formación y lo siguen para apoyarlo y protegerlo.


Reflexiones:

En las organizaciones un  principio básico que debe reinar,  es que todos los componentes del equipo  deben compartir una única dirección, con objetivos  claros y sobre todo comunes, los logros trabajando en equipo son mejores y más fáciles de conseguir.

En las organizaciones muchas veces se descuida y no se potencia  el trabajo en equipo,  muchas veces creemos que nuestros resultados son mejores que el de nuestros  compañeros y no tenemos en cuenta  que trabajando en equipo se pueden llegar a objetivos increíbles.


Algunas frases que tienen que ver con el trabajo en equipo:

 - Yo hago lo que usted no puede, y usted hace lo que yo no puedo. Juntos podemos hacer grandes cosas.

 - Trabajar en equipo divide el trabajo y multiplica los resultados.

 - Ninguno de nosotros es más importante que el resto de nosotros. Ray Kroc.

 - No preguntes qué puede hacer por ti el equipo. Pregunta qué puedes hacer tú por él. Magic Johnson
 
 - Son tres las cosas que le diría a un equipo para ayudarlo a mantenerse unido: Cuando     algo resulta mal:   yo lo hice. Cuando algo resulta mas o menos bien: nosotros lo hicimos. Cuando algo resulta realmente bien: vosotros lo hicisteis

Nada se consigue sin ESFUERZO. Hay que trabajar, con motivación, con muchas ganas, no olvides aplicar el método, constancia y organización y si además tienes posibilidad de hacerlo en equipo los resultados se multiplicaran.